¡¡ATENCO NO SE OLVIDA!!

¡¡TAMPOCO OLVIDAMOS EL 2 DE OCTUBRE Y EL 10 DE JUNIO !!

¡¡NO AL REGRESO DEL PRI!! ¡¡NO A LA IMPOSICIÓN!!

Tenemos la oportunidad para una lucha política central contra el régimen de la oligarquía neoliberal.

Durante estos años se mantuvieron heroicamente diversos movimientos de resistencia a la ofensiva privatizadora y represiva del neoliberalismo. Aunque no logramos revertir completamente esas políticas neoliberales, movimientos de resistencia ejemplares como los del SME, los maestros, los mineros en huelga, los trabajadores de Mexicana, la lucha contra las reformas del ISSSTE y contra la ACUDE, se han mantenido en condiciones muy difíciles y sin rendirse. Los dirigentes del SME plantearon, en su momento, una conclusión decisiva de su experiencia: nuestra lucha no es simplemente laboral, sindical, ante la Secretaría del Trabajo, ante el Congreso o el Poder Judicial, instancias todas que les han negado sus derechos. La lucha es política, contra un régimen controlado por los intereses de una oligarquía no solo privatizadora sino depredadora de los intereses nacionales y de los trabajadores. Para dar esa lucha política es que propusieron la creación de una Organización Política del Pueblo y los Trabajadores (OPT).

Pero para derrotar a la pandilla neoliberal en el poder es necesario dar esa lucha en el terreno político más allá de las legítimas y heroicas luchas que por separado estamos dando. Los agravios de la oligarquía y el neoliberalismo son nacionales y van más allá de los que hemos sido los primeros afectados, es decir los trabajadores. El descontento y la oposición a la oligarquía se extienden entre diversos sectores y clases sociales, incluso personajes y sectores de la clase dominante y de sus partidos que se pasan a la oposición. El aislamiento social y político de la pandilla neoliberal se extiende a pesar y debido a la escandalosa concentración del poder, del dinero y del control que tienen sobre los medios de comunicación.

La confrontación con el régimen oligárquico se ha concentrado ahora con motivo de la elección presidencial. Se ha abierto una importante oportunidad de conformar un movimiento muy amplio, que es en efecto políticamente heterogéneo y pluriclasista, pero opuesto a la continuación del régimen neoliberal en cualquiera de sus caras, ya sea la del PAN, prácticamente desechada, o la del PRI que es la amenaza mayor. Este amplio movimiento, un bloque social heterogéneo, es el que se está agrupando alrededor de la candidatura de Andrés Manuel López Obrador (AMLO).

El propio López Obrador está planteando que lo que está en juego en esta elección presidencial es la perspectiva de un “cambio verdadero” como él lo llama. El cambio verdadero, efectivamente, no puede ser otra cosa mas que un cambio de régimen. El cambio verdadero no puede ser simplemente un cambio de personas, del personal político, en las mismas instituciones y prácticas políticas podridas y corruptas, en decadencia y servidoras del interés privado de la oligarquía. Tiene que cambiar todo el régimen político y así sacar a la pandilla neoliberal. Revertir las privatizaciones de las empresas nacionales y parar la supuesta guerra contra la delincuencia, verdadera militarización del país, regresando al ejército a los cuarteles. No queremos venganza pero sí queremos justicia, acabando con la impunidad de los miles de crímenes (ejecuciones, desapariciones, feminicidio) cometidos por el priísmo y el panismo. Para todo ello se requiere de un radical cambio de régimen, sus leyes e instituciones.

Ante el creciente clamor popular que exige este cambio verdadero que dice AMLO, el régimen se apresta a realizar otro fraude para imponer su salida y elección como en el 2006 “haiga sido como haiga sido”. Ahora, por medio de la manipulación mediática, quieren imponer e inventar al candidato del duopolio televisivo, Enrique Peña Nieto, personaje de sus programas de caricaturas o telenovelas, como Presidente de México.

La polarización que se desarrolla para impedir los designios de la pandilla neoliberal y sus instrumentos, televisa y tv azteca, crece cada día pero ha conocido un cambio cualitativo con el surgimiento del nuevo movimiento estudiantil, el movimiento #yosoy132.

El nuevo movimiento estudiantil surge oponiéndose a la manipulación mediática del duopolio televisivo. El movimiento se declara y se organiza como un movimiento autónomo, un movimiento apartidista, pero claramente a favor de la participación política consciente, es decir no es abstencionista ni a favor del voto nulo en esta decisiva circunstancia. Es un movimiento apartidista, pero políticamente activo, lo que quiere decir que es plural y democrático en su composición. Debido a ello es que siendo apartidista pero políticamente consciente, defiende y recupera aspectos centrales de la memoria histórica del pueblo mexicano. Dice, como dijeron los estudiantes de la Ibero frente a Peña Nieto: ¡Atenco no se olvida! Por esas razones y conscientes del peligro que se avecina también se definen como anti Peña Nieto, como anti PRI. Hay memoria histórica, como se muestra este 10 de junio, e integran un nuevo movimiento para impedir el regreso del PRI, lo que está modificando decisivamente la relación de fuerzas en la oposición al régimen oligárquico neoliberal.

Estamos ante una oportunidad única para en el terreno político y en forma centralizada sacar a la pandilla neoliberal del gobierno y abrir el camino para un cambio de régimen. Como dice el movimiento #yosoy132 no hay que abstenerse. Es la hora de la política, de otra forma de hacer política, en la movilización masiva y en las calles. Pero también votando, votando para evitar la continuidad neoliberal, pero también manteniéndose organizados y movilizados para oponerse al fraude y la manipulación mediática de televisoras y encuestadoras.

Es también la hora de mantener organizado al movimiento y de mantener su independencia y autonomía, incluso frente a un futuro y eventual gobierno de López Obrador. Realizar el “cambio verdadero” exige mantener esa independencia frente a un nuevo gobierno que unificando un bloque social tan amplio y heterogéneo, en el terreno político con grupos provenientes del PRI, del PAN e incluso con sectores conciliadores y arribistas del PRD y del Movimiento Progresista y en general de un movimiento pluriclasista, deberá desde la izquierda revolucionaria y del movimiento de los trabajadores y estudiantes mantener su independencia para empujar por el “cambio verdadero” ante las presiones y frenos que al propio AMLO le querrán imponer otras fuerzas sociales que ahora se han pasado a la oposición.

A la hora de la votación te invitamos a votar por la candidatura de AMLO. Ciertamente puedes expresarlo haciéndolo por cualquier de los partidos del llamado Movimiento Progresista. Como al mismo tiempo se eligen diputados y senadores, y en algunos casos concurren también elecciones locales, y generalmente las candidaturas son comunes para los tres partidos del Movimiento Progresista, proponemos votos diferenciados por alguno de esos partidos ya que localmente a veces tienen candidaturas de oportunistas y conciliadores, así como trayectorias nefastas. El PRD, especialmente, rechazó las candidaturas propuestas por AMLO para diputados y senadores, algunas de las cuales fueron postuladas más bien por el PT (Partido del Trabajo). Por ejemplo, nuestro compañero Martín Esparza, secretario general del SME y dirigente de la OPT, está postulado por el PT en su lista plurinominal en la circunscripción del centro del país que incluye al DF, Morelos, Guerrero, Puebla e Hidalgo. Por ese motivo estamos invitando a votar por el PT, integrante del Movimiento Progresista, en todas las boletas electorales desde la presidencial con AMLO a la cabeza hasta las de diputados y senadores.

Es la hora de una lucha política decisiva. De organizar y defender la votación, especialmente desde el esfuerzo que se hace en MORENA, en sus varias vertientes como MORENAJE o MORENA Cultura. Pero también de organizar un amplio movimiento de estudiantes y trabajadores autónomo e independiente, apartidista como dice el Movimiento#yosoy132, pero políticamente claro contra el PRI y Peña Nieto. Tanto en el nuevo movimiento estudiantil como en la resistencia de los trabajadores como los del SME y el esfuerzo de organización política independiente que es la OPT.

Es la hora de la lucha política, no solo en esta coyuntura, sino en la organización política permanente, de largo plazo, que ante la degradación y decadencia política de los partidos institucionales, plantea que es posible otra forma de hacer política, de ser partido. Que plantea y llama a que otra izquierda es necesaria, una izquierda que es parte de este movimiento radical, y que se construye como socialista, antiimperialista, anticapitalista, internacionalista, feminista y eocosocialista. Es la izquierda que organizamos desde el PRT y a la que te invitamos a unirte en forma militante.

México, D. F. A 9 de junio de 2012.

PARTIDO REVOLUCIONARIO DE LOS TRABAJADORES.

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